Los inasequibles al desaliento

Los inasequibles al desaliento

miércoles, 7 de septiembre de 2011

Pavo veraniego (al guijuelo).

Hoy toca ruta corta, unos tenemos que realizar trabajos domésticos y que  estar pronto en casa y a otros hay que recuperarlos de su mes de baja por enfermedad. Se dedide hacer la Ruta del Pavo con alguna variación.

Salimos ya de nuevo los 4; Ismael, Nacho, Miguel y yo tranquilamente hacia Alberite disfrutando de la buena mañana, pasamos este pueblo por el camino de la bodegas donde hubo un pequeño despiste de quienes nos llevaban en cabeza. Subimos a Clavijo por el camino de la Unión, una subida tendida y asequible pero que a Miguel y a mi se nos atravesó un poco, viendo a lo lejos como los cuñaos iban de charleta como si llanearan, al menos la última rampa debajo del almorzadero de Clavijo la subí del tirón, mas que nada porque había gente mirando y en esos casos hay que hacerse el valiente, pero llegue reventaó, y es que no se puede entrenar tanto entre semana que llegas al domingo cansao.

Los que miraban en cuestión eran los amigos del Pinchazo que iban a hacer la Senda de Igor que debe estar por la zona, posteriormente aparecen los del Reventón que se iban a dar una buena paliza por la zona de Luezas y Soto, aunque alguno de ello llevaba una bici muy tramposa.

Nosotros nos abrigamos un poquillo y ya para abajo por la Manolita, con algún desvío que me enseñaron hace poco el Lukas y el Sergio de KDDS para ir quitando miedo a las zonas técnicas.



Giramos a la derecha a la mitad de la cuesta y nos vamos por el camino que lleva al Monasterios, que dejamos para continuar recto después de un par de repechos  llenos de hierba (como cambia la cosa de diciembre a agosto) bajamos hasta la carretera de Ribafrecha, aquí el Miguel revienta la cámara por ser un radical bajando y aprovecho el cambio de rueda para escaquearme para casa mientras ellos, espero, suban de nuevo a la Unión y no se queden en Ribafrecha almorzando, que esta gente en cuanto les quitas la vara de encima se descarrian.




 No se si pasaría algo mas digno  de mención, siempre hay quien puede continuar esta crónica. Bueno, hasta el próximo domingo cuando los de Rutas Moncalvillo en la kedada que preparan nos pongan finos de arañazos por los recovecos del Moncalvillo.










































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